KAMASUTRA.- El perrito

LA POSICION DEL PERRITO, LA UNION DE LA VACA O LA UNION DEL GALGO

por SILVIA PONS

Esta es la más clásica y usada de las posiciones que podríamos clasificar como “las entradas por detrás”. 

No creo que sea una expresión muy lograda, tal vez su expresión impersonal de esa entrada que nuestra información genética vincule con “la voluptuosidad animal”. Sin lugar a dudas es la posición que nos vincula más a las practicadas por nuestros ancestros y tampoco deja de ser un fuerte estimulo por parte de hombree, cuando el separando los glúteos de ella efectúa la entrada en la vagina.

Sin duda el hombre , según las encuestas, prefiere esta posición por delante de otras mas sugestivas, puede ser por la facilidad de llegar a la eyaculación más rápidamente.

Que pasa con el placer de ella

Las opiniones de ellas, parecen ser bastante divididas: a unas les gusta, a otras muchísimo, hay otras que les gusta un poco y otras que no les gusta nada.

Pero partiendo que la pareja quiera practicas esta postura.

Cuales son sus ventajas

Para el hombre una de ellas es que tiene un gran nivel de flexibilidad de movimientos y según las formas de friccionar que quiera adoptar. Es tremendamente excitante para el ver por si mismo como entra y sale de la vagina y visualiza al mismo tiempo el ano de ella, por si resultara una opción futura de cambio de 

penetración, después de realizar la actual.

El puede moverse con facilidad que profundidad de penetración puede utilizar lo que añade un placer muy poderoso. Ella puede mover las caderas de todas las formas posibles, una opción también es la que ella permanezca inmóvil  dejando que el lleve la iniciativa o bien puede dar un movimiento a su pelvis hacia adelante y atrás frotándose los sexos.

Si una de las variantes que quiere utilizar el hombre es la de inclinarse hacia adelante y abrazarse a ella, el podrá servirse de las manos para acariciar buena parte del cuerpo de ella y en especial sus partes mas erógenas como pueden ser los pechos y el clítoris.

También el hombre podrá ver los glúteos de ella, lo que supone un gran aporte al estimulo sexual visual de el, además de tener acceso libre a la estimulación del ano de ella que aporta muchas sensaciones placentera a las parejas que permitan este tipo de caricias.

Otra variante es la que el hombre se mantiene completamente inmóvil, mientras que ella frota con sus caderas hacia adelante y atrás sobre el pene, dejando entrever la fogosidad de la mujer, lo que resulta para el hombre motivo de una excitación extrema.

Posiblemente haya parejas que no les guste mucho esta posición por diversos motivos y uno de ellos sea el no poderse mirarse y ver la expresión de sus caras, para esto hay una opción muy sencilla, colocar estratégicamente puesto un espejo en frente de la pareja, con el fin de permitirse a ambos mirarse a los ojos y establecer con ella una conexión más intima, independiente de ver el espectáculo que les ofrece el verse a si mismos haciendo el amor con la persona amada.

Cuando se realizan estas posturas, puede parecer que el hombre se desliza hacia fuera, esto no tiene que ver nada con el tamaño del pene. Mas bien se considera falta de práctica, donde el hombre debe aprender a establecer un ritmo lento y constante, a la vez que controla la profundidad de la penetración, con el fin de que su pene no se salga. Ella debe ayudar con el movimiento de sus caderas donde llevará un poco de tiempo, el coordinar todos esos movimientos conjuntos de pareja, aunque el resultado de todos estos aprendizajes valgan la pena.

La intensidad de esta experiencia hará que el hombre eyacule con rapidez, por lo que será una forma excelente para terminar una buena sesión de amor, donde ella ya habrá obtenido unos orgasmos y el hombre se preparará para recibir el suyo bien merecido.