Ya sabéeis que los japoneses son tremendos cuando se trata de artilugios sobre el sexo.
Pues a la marca de lencería japonesa Ravijour, no se le ha ocurrido otra cosa que inventar un sostén que solo se puede abrir o desabrochar, solo cuando su dueña tenga un enamoramiento verdadero o un gran deseo sexual.
Y a mi que me suena este invento como la versión del siglo XXI del viejo cinturón de castidad, porque ya sabéis que esto de la tecnología punta no es lo mio.
Pero para las amantes de la high tecnology les encantará llevar un sostén "inteligente", que tenga unos sensores que analizarán su ritmo cardíaco y que le llevará a deducir su estado de excitación y según este abrirá el cierro que este sofisticado sostén tiene entre sus senos.
Lo que para mi es una prenda en según que situaciones muy romántica, pasa a ser un objeto tecnológico.
Funciona de manera que los sensores incorporados al sostén envía mediante bluetooth, al telefono smartphone de su dueña, el cual tiene una aplicación de mobil donde hace un análisis comparativo de los latidos del corazón, y si su deducción llega a los parámetros establecido en la app, esta manda una señal al cierre de la prenda que hace que este primero parpadee y luego se abra.
Este tema daría mucha que hablar y alguna que otra broma por parte de Silvita de la Calzada, pero por suerte solo se trata de una campaña de comunicación, para el décimo aniversario de la esta marca de lencería y no se pondrá a la venta.
Lo que no se es si posee un sistema de seguridad que le permita a una sacárselo, para evitar algún posible accidente cuando por causa de un tocamiento o una atracción visual, tu corazón se pone a cien sin existir ni amor ni ambiente adecuado, Y si te roban el mobil o se estropea, incluso si pierdes la clave, tendremos que tener las domingas atrapadas toda la vida. No se no me convence.
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